Cap.28

El avión empezó a tomar velocidad y yo  me ponía cada vez más nerviosa, volar no era una de mis cosas favoritas ni mucho menos..

-Les informamos que estamos apunto de despegar, por favor mantengansé en sus asientos con el cinturo abrochado.-

Como era de esperarse, viajabamos en clase ejecutiva, donde los asientos eran enormes y solo de dos..

Sentí una inmensa taticardia al sentir separnos del suelo y mi mano se dirigió la de Andrew instintivamente..

Cuando me di cuenta ya era tarde pues había cerrado sus dedos entorno a los mios.

-Andrew- le llamé para que me liberara.

-Oh, lo siento- dijo y me soltó.

Me recliné el en el asiento y cerré los ojos tratando de pensar en algo que me distragera de la altura y de que me estaba separando del chico que mas quería.

Mi Jack.

Volvería a estar perdida sin él, volvería a mi vida normal, a esa vida aburrida y monotona que me había forjado.

Pero al fin y al cabo era gracias a él que yo estaba allí, él fue el que me hizo regresar a Nueva York y ahora me estaba alejando por lo mismo.

Lentamente abrí los ojos y miré el cielo gris, y las nuves pasar.

-¿En que piensas?- pregunto Andrew.

Suspiré y me volví a verlo.

-En nada- luego sabíendo que nos esperaban tres horas de vuelo empecé a sacarle tema- Cuentame de ti Andrew, creo que no hemos tenido la oportunidad de conocernos mejor, digo, si vamos a trabajar juntos...

Sonrió y tomando el baso de vidrio con Vodka en el, que le ofrecia la asafata, contesto.

-Mi familia en sierto modo es igual a la de Jack- empezo- Solo que mi madre no ha muerto, ellos están separados, mi madre es una pianista francesa y como espero ya sepas mi padre es dueño del Bank of America-

-¿Y porque decidiste ser productor?-

-Yo no quería que mi padre me pagara la universidad, no me gusta que la gente piense que soy el niño mimado de su padre, así que conseguí entrar a Dartmouth, y conseguí un trabajado de medio tiempo-

-Cuentame más de tu tiempo en la universidad- queria compararlos con los mios.

-Bueno, conocí a esta chica, era hermosa, bueno lo sigue siendo, nos enamoramos y nos ibamos a escapar juntos, ya era mi prometida, pero algo cambio y terminamos. su voz era tan indiferente como si estuviera contando la historia de alguien más.

-¿Como se llamaba?-

Me miró a los ojos y sonrió.

-Miriam, Miriam Master-

Lo miré tan sorprendida como él esperaba que lo estuviera.

-¿La hermana mayor de Jack?-

-Si ella-

-Wow, no me lo esperaba-

-Nuestro noviazgo fue en secreto, nadie sabe que planeabamos casarnos, después ella conocio a Antonio, creo que es Argentino o Español, no sabía que se casarían hasta Navidad cuando nos volvimos a ver en la fiesta que su padre dio-

No me lo podía creer, Miriam la hermana de Jack y Andrew..

-Supongo que no ten sientes bien al hablar de ello-

-Te equivocas-

Lo miré sorprendida, cuando decides casarte con alguien es porque estas locamente enamorado...Y un amor como ese no se olvida...

-¿Porque?-

-Fue algo de momento, ella es una chica realmente brillante, pero creo que eramos tan distintos que las cosas no funcionaban bien, cuando te das cuenta que dejas de extrañar a alguien en su ausencia ya no es una buena señal-

Bueno, entonces eso significaba que mi amor por Jack era muy grande, porque aun no pasabamos la hora de vuelo y yo ya deseaba regresar.

-No e tenido el gusto de conocer personalmente a Miriam ni a su prometido-

-¿Y tu? ¿Desde cuando sales con Jack?-

Volví mi vista a la ventanilla, el cielo se iba aclarando mientras nos acercabamos más al sur.

-¿Desde cuando? No sé, en realidad nuestra relación es muy espontanea, generico-

Los ojos me brillaban cada vez que hablaba de eso, y la emoción inundo mi pecho.

-¿Porque no ha venido con nosotros?-

Baje la vista, había dado en el blanco.

-El también tiene sueños que perseguir- suspiré.

No dijo nada más.

-¿Señorita? ¿Le puedo ofrecer algo?- pregunto una azafata.

-No, gracias- le respondí y miré para el cielo.

Este tiempo iba a ser tan largo..

-¿Donde nos quedaremos mientras estemos en Loa Angeles?- Él había dicho que se encargaría de todo.

-Tengo una casa en Bel Air, es muy grande, tiene muchas habitaciones y piscina, algo modesto-

¿Algo modesto? ¿Quien podía decir que tenía una casa en Bel Air y decir que es "algo modesto"?..

La idea de vivir bajo el mismo techo que Andrew me parecía un poco incómoda..

-Ummm- fue lo unico que pude decir.

-Se que te parece algo incómodo, y como pensé en eso también, ahí otra casa allí, como de invitados, esta muy completa, a´si que podrás instalarte allí-

Esa idea me agradaba muchisismo más.

-¿No seré una molestia?-

Mi comentario pareció ofenderle.

-Claro que no, Dakota, mi casa es tu casa, puedes utilizar todas las instalaciones y el servicio esta a tu orden-

-Gracias...

-No digas nada-

Me recoste de nuevo en el asiento y cerré los ojos, logrando con exito poder dormir.

-Bievenidos a Los Angeles, California, la temperatura es bastante cálida, de 25 grados, por favor, espere a que la señal se apague, gracias por volar con nosotros-

Pero como era de esperarse nadie espero, pero como no bajamos con equipaje de mano, solo nos levantamos cuando se abrieron las puertas, tome mi abrigo y mi bolsa y salimos del avión.

Me sentí casi mareada al pisar piso firme, era un gran alivio para mi.

Al fin estabamos en California, en Los Angeles.

Esperamos en la linea de Cuidadanos que avanzo rapidamente, llegamos donde el oficial reviso nuestros pasaportes, pero cuando ya me habían dejado pasar detuvieron a Andrew.

-Por favor señor, mire a la camara- le ordenó el oficial, Andrew obedecio y miró fijamente a la camara.

Espere con paciencia y lo que escuché me sorprendió.

-Usted tiene cargos por violencia- le acuso el oficial, yo lo miré atonita mientras Andrew le explicaba.

-Cumplí mi condena por eso, allí tiene que decir-

-Si efectivamente-

-¿Podemos seguir?- pregunto.

-¿Cual es el parentesco entre ustedes?-

-Viajamos juntos nada más- conteste.

Frunció el ceño y le entrego su pasaporte a Andrew.

Esperé a que se alejara de allí y cuando esperabamos en la banda para recoger el equipaje me atreví a preguntar.

-¿Violencia?- pregunte un poco cohibida.

Él me miró divertido.

-No fue contra ninguna mujer ni nada por él estilo- murmuró mirandome a los ojos- Golpie a un tipo en la universidad, no lo e vuelto a hacer.

-Oh- fue lo único que articule, miré y esperé a que mis maletas aparecieran, pero no fue necesario sacarlas yo porque Andrew me ayudo, esperamos las suyas y nos dirigimos a revisión de nuevo.

Salimos y allí estaban, un montón de camarografos y reporteros.

-Señorita Miller, Señorita Miller- me grito una mujer con un enorme microfono en mi cara- ¿Ya tiene en mente a los actores para La vida en Mi?, se dice que es muy prometedora...

Miré a Andrew que con una sonrisa se paro y enfrento a los medios con una maestría digna de admirar.

-Todavía no tenemos pensado los personajes, pero estaremos viendo las locaciones y empezaremos con las audiciones dando una conferencia de prensa, Gracias-

Estallaron en más preguntas, pero las ignoramos y lo seguí por el enorme aeropuerto, hasta llegar a un BMW descapotable rojo...

Me quede con la boca abierta, era el auto de mis sueños..

Guardó las maletas en el cajón de atrás e hizo que el seguro se quitara con las llaves..

-¿Es tuyo?- pregunte acariciando la reluciente pintura.

Que pregunta tan estúpida era obvio que si.

-Claro, vamos entra- me invitó.

Sentía que el corazón se me aceleraba, estaba emocionada..

Pero Jack cruzo mi mente como un relampago.

Me abroche el cinturón de seguridad y acaricie la piel colo beig.

Empezamos a salir del aeropuerto y yo miraba maravillada todo lo que me rodeaba, el enorme letrero de LAX en neón estaba rodeado de palmas e inicaba la entrada a la autopista.

Las azafatas tenían razón, era cálido afuera, así que tuve que quitarme el sueter que llevaba y me quede en una simple blusa blanca.

-¿Habías venido alguna vez a California?- me pregunto Andre poniendose unos lentes de sol que le daban un estilo digno del lugar donde nos encontrabamos.

-No, en realidad no-

-Bueno, tendré que ser tu guía turistico-

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Beverly Hills, Rodeo, Hollywood...

California era el paraiso para cualquier estrella de cine, el glamour estaba al tope.

-El Teatro Kodak- me indico mientras pasabamos junto a él.

Me sentía un niño en Disneylandia.

Pero suspiré, tenía el deportivo rojo, tenía a California, tenía mi sueño..

Pero no tenía a Jack conmigo.

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Este capitulo me recuerda el primero en la ultima parte..


Es triste hahaha, espero que les guste los pequeños cambios que le hice la blog..


Bueno, gracias por leer y comenten las amo!