sábado, 30 de abril de 2011

Mis queridas lectoras, las invito a que sigan soñando :D

Bueno, se que les debo el capitulo, pero esto no es para eso, esto es para algo que concidero importante..

Y son los sueños de la infancia, cuando eramos niñas o niños, todos soñabamos con ser bailarinas, veterinarios, bomberos, y presidentes.

Pero ¿Qué creen?, crecimos, nos dimos cuenta que el mundo no es como lo era antes, que no es fácil conseguir lo que quieres y ahora, esos sueños que antes te parecían aunque lejanas, posibles.

Hoy mientras pensaba en miles de cosas, en las cosas que van peor en mi pais, México y en todo el mundo, cuando piensas que en realidad las cosas van peor y que no hay esperanza, pensé, "Me volveré presidenta, así todo mejorara", en ese momento, por 10 segundos me volví la niña preguntona de primer grado que pensaba que lo sabía todo y que de verdad deseo ser presidenta, pero después dije "Madura, ya tienes 15 años"..

Recorde haberle dicho eso, que quería ser presidenta a una amiga, y ella me dijo "esos son sueños de niño"...

Pero, la gente más importante de este planeta, leyendas y gente que lo cambiaron el mundo, no dejaron de soñar, me dije que si de verdad luchaba por eso, si de verdad quería cambiar la sociedad, que todo mejorara, si podría, pero que tendría que esforzarme..

¿Como creen que se creo la ley de la relatividad?...Albert Eintein imaginaba, soñaba...Y comprobó su hipotesis.

No estoy diciendo que quiera ser presidenta, aunque no es mala idea, pero, lo que quiero decir con esto es que, no pienden en eso de "Es un sueño absurdo", "Algo de niños"..

Como dice la canción de Selena Gomez, ¿Quien dijo?..

¿Quien dijo que yo no podré algún día ser una bailarina?, tal vez pienses que no eres buena bailando, pero ¿Quien dijo?, las aptitudes se desarrollan..

¿Quien dijo que yo no puedo publicar un libro?...Trabajando y mirando al frente, se que podré, aunque me digan que no, que soy una soñadora empedernida, y que debería poner los pies sobre la tierra..

Lo que yo digo es "Los tengo bien puestos, mis pies estan en la tierra, pero ¿Porque tengo que conformarme con eso?"..

No te conformes amiga, sueña, vive, y si, hay desilusiones, pero siempre hay una manera de levantarse, mirar al frente y encontrar un nuevo camino..

:D

Todas tenemos un sueño, no pienses que es imposible, que es tonto, que es infantil..

ES TU SUEÑO Y NADIE TIENE DERECHO A DECIRTE QUE NO!.

Me gustaría que meditaran en esto : D

Gracias a todas y les prometo nuevo capitulo :D

pronto..

Las quiero mucho.

Gracias por leer.

sábado, 23 de abril de 2011

Cap.6

Eran las 12 de la noche cuando Andrew se fue, y yo subí las escaleras a mi habitación, estaba exhausta por todas las emociones del día anterior.

Me puse mi bata y me metí a la cama, me volvía  asentir sola, miré a mi alrededor, la puerta siempre estaba abierta al igual que la luz de corredor encendida, no quería que Nathan se levantara a media noche y estuviera en la obscuridad, tal vez lo estaba sobre-protegiendo mucho, pero, sentía la necesidad de hacerlo.

Suspiré dispuesta a conciliar el sueño.

-Mami- escuche la voz de mi hijo, al principio pensé que era una ilusión, pero no era así, allí estaba Nath en mi puerta.

-¿Pasa algo?- pregunte, el niño se acerco y me tendió los brazos, tenía miedo.

Lo levante del suelo y se metió bajo las sabanas acostandose a mi lado, lo abrace y él cerró los ojos, cómodo y seguro.

-No te preocupes- murmuré muy bajo- Mami esta aquí.

La que se preocupaba era yo, ¿Qué pasaría ahora?, ¿Jack intentaría quitarme a Nathan?, ¿Cómo afectaría a Nathan todo el proceso?, ¿Era mejor llegar a un acuerdo?, ¿Debía llevar a Nathan conmigo mañana?..

Eran muchas las dudas que se acumulaban en mi mientras miraba a mi angelito dormir entre mis brazos, si solo pudiera tenerlo así para siempre, poder protegerlo siempre..

Pero eso no era posible y tal vez era yo la que lo lastimaba.

Una lágrima resbalo de nuevo por mi mejilla, era por la angustia, la angustia de que Nathan tubiera que pasar por un traumatico proceso legal, ir a tribunales..

Lo confundirían más de lo que estaba..

No podía permitirlo, no podía dejar que le hicieran daño..

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Tenía un hijo..

Todavía no me hacía la idea de eso, de que había una nueva vida, una vida que llevaba la mitad de mi sangre, la mitad de mi.

Nunca me había planteado la idea de tener un bebé, ya había olvidado ese sueño de ser padre, porque con la única persona que quería tener hijos era con Dakota..

Y no sabía si alegrarme o sentir alguna otra cosa que no conocía, esto era más nuevo para mi..

Dakota y Yo teníamos un hijo.

Era... maravilloso.

Miré las estrellas, miré como brillaban aquella noche, Ella había dicho abogados, pero yo no quería lidear con eso, no haría que Nathan pasara por eso.

¿Dakota me creía así?.

-Mira en lo que habías convertido- me dijo una voz dentro de mi, tal vez era la razón, la que había dejado de hablar desde que Dakota se fue- Perdiste el rumbo, volviste a lo que eras antes o algo peor, eras un arrogante, arrogante estrella de rock, te creías el rey del mundo, ¿Como no iba a estar asustada?.

Pero ella me hacía volver siempre a mi camino, me hacía pensar que debía de cambiar.

La primera vez fue así y ya vimos lo que paso ¿No?, sin ella estaba perdido, no había aprendido nada.

¿Me había extrañado?, ¿Había pensado en mi tanto como yo en ella?.

Recordaba esas noches, esas noches que para la prensa eran "Nueva noche desenfranada de Jack Master", para mi eran noches de desesperación, esa desesperación que sientes al no poder olvidar a Dakota, esos tragros eran para poder quemarla de mi mente, esas mujeres eran para poder encontrar otros labios más dulces.

Pero no se podía, no había manera de encontrar a otra, no había manera de borrar su recuerdo.

Y en noches como estas, cuando el cielo me hacía pensar que de alguna manera había esperanza, de que, si el cielo podía ser así de bello en la obscuridad, la vida también, en la obscuridad siempre hay algo.

¿En realidad era mi culpa nuestra ruptura?, ¿Fue mi culpa al orillarla a casarse conmigo?..

John y Andrew me lo dijeron, hasta Tom, pero no hice caso, estaba tan ocupado pensando en salvar lo único que quedaba de mamá que quería que Dakota fuera como ella.

Me había equivocado y le había hecho ver que yo era un egoísta, la iba a condenar a ella y ahora a Nathan a una vida que no querían.

A Dakota, a ocuparse de una revista en vez de dirigir su pelicula, de privarla de su sueño y a Nathan a una vida donde su padre estaría ausente en giras y su madre tan estresada por los deberes que no podríamos ocuparnos de él.

Pero Dakota lo estaba haciendo bien, la forma en que miraba a Nathan, la forma en que el niño la abrazaba.

Me hizo sentir celos, Nathan era tambipen mi hijo y no había estado con él en dos años, no había estado con Dakota cuando se entero que estaba esperando un hijo, no estuve con ella durante el embaraza, ni cuando fue a comprar la cuna para el bebé, no estuve cuando las contracciones vinieron, ni sostuve su mano cuando el dolor la doblaba...

No estuve en sus primeros pasos, no estuve cuando dijo su primera palabra..

Pero podía estar cuando entrara al Kinder, podía estar en su graduación de secundaria, cuando decida irse de casa, cuando compre su primer auto, cuando salga con una chica y se enamore por primera vez.

"La única y primera vez"..

Cuando se case..

Quería estar al lado de Dakota cuando eso pasara, al lado de ella y de Nathan, quería sostener la mano de ella cuando llorara al ver a su hijo casado, o convertido un hombre, quería estar junto a ella cuando tengamos a nuestro primer nieto..

Quería estar con ella hasta la muerte.

Porque la amaba, porque nunca podría dejar de amarla, porque ella y yo siempre formaríamos uno, siempre seríamos la suma de uno y uno..

Porque siempre sería uno.

Las lágrimas corrieron, estaba llorando, Jack Master lloraba, lloraba porque había perdido a su amada, lloraba por la emoción de saber que tenía un hijo con ella, lloraba de frustración, por no saber que hacer, por haber sido un imbécil.

-¿Estas bien?- pregunto una voz, era la de John, ya había regresado.

-No, no lo estoy- dije, él abrió la puerta y camino asía mi.

-¿Hablaste con ella?- pregunto.

-¿Te mando al diablo? Yo lo haría si fuera ella- un voz familiar, era la de Tom.

Me giré para ver a mis amigos, por lo menos los tenía a ellos.

Le sonreí, si es que a eso se puede llamar sonrisa y abracé a Tom, lo había extrañado.

-Si- respondí mirando a John- Y no, bueno tecnicamente no me mando al diablo.

Soltó una carcajada.

-¿Estabas llorando?- pregunto John mirando los restos de agua salada que quedaron por mis mejillas.

Al principio me dio verguenza, pero después pensé "¿Que más rayos da?" eran mis amigos, ellos sabían mi historia.

-Si, yo...Me di cuenta de que mi vida es un fracaso-

Nos sentamos en la terraza, donde el aire fresco nos daba y nos dejaba hablar con tranquilidad.

¿Que horas eran? ¿La 1 de la mañana?..

-Ganaste dos grammy´s y cantas para los grandes, amigo, no eres un fracaso- intento ayudarme Tom.

-No en ese sentido, aunque acabo de renunciar a mi gira, así que enfrentaré miles de problemas legales, además de la prensa y todo ese tipo de cosas- yo me refería como hombre, fui un cobarde egoísta, pero ahora que se que Nathan es mi hijo no echaré a perder esto..

Ellos me miraron no tan sorprendidos como esperaba.

-¿Ya te lo dijo?- pregunto John.

-Si- respondí.

-¿Y como lo tomaste?- pregunto Tom.

-Bueno, yo me desmaye unos pocos segundos después, así que tu juzga-

Ellos se miraron y después se partieron en risa, las carcajadas se escuchaba como alaridos en lugar de risas.

-Se supone que deberían de estarme ayudando- aunque a mi también me dio algo de risa.

-Vamos, mañana solucionaremos esto, hoy hay que descansar- dijo Tom, quitandose los zapatos y acostandose en mi cama.

John y yo lo seguimos, era cierto, mañana me preocuparía, aunque no podría dejar de pensar en eso.

Nos instalamos en los sofas que había en la habitación y Tom encendió la pantalla plasma.

"Ultima noticia, el cantante de moda, Jack Master, que en pocos años ya lleva una trayectoria escrita en el medio de la música, acaba de abandonar hoy su gira internacional, no se han dado declaraciones, pero estas son imagenes de su manager saliendo de la casa del rockero esta mañana"

"Él a mandado todo al carajo" y unos pip pip.. por palabras no adecuadas a menores de edad.

Me estampe la mano en la frente..

Esto ya era el colmo.

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¿Que tal la noche de estos dos?, bueno quiero comentarles algo acerca de este cap.


La primera parte, osea la de Dakota, esta basada en "Never grow up" de Taylor Swift, no soy mamá ni mucho menos, pero creo que así se a de sentir una mamá cuando ve a su hijo así, queriendolo proteger de todos y de todo.


La segunda, la de Jack, estaba basada en "Drops of Jupiter" de Train, es una de mis canciones favoritas y es respecto a Dakota. 


Espero que se tomen el tiempo de escucharlas :D


Y de comentar :D Gracias a todas por sus comentarios porfavor espero seguir viendolas por aquí.


:D





viernes, 22 de abril de 2011

Coge un libro :D

Hola, bueno, mis amigas me han dado unos cuantos premios y este juegito que me gusto :D

Gracias Mely y Luz, además de las chicas que me dieron el otro premio :D

empecemos con el de Luz :D

El juego es así, hay que agarrar el libro que quieras, ir a la página 89 y copiar en la entrada del blog la frase de la línea 5 de esa página, después de citar el libro.  Entonces... Aqui va la frase :


Por el Coronel Blythe y Charlo Osborne.


Bueno, el libro se llama "La Sonata de Nomeolvides", habla de Audrey, una chica soñadora de 18 años, en la epoca colonial Inglesa en Argentina, la cual se enamora de Louse, un ingles, que todo mundo creía loco, el problema es que....Louse es hermano de Cecil, el hombre con que todo mundo espera que Audrey contraiga matrimonio...


En lo personal, me gusto mucho como esta contada la historia, es un muy buen libro y creo que una muy buena historia romantica :D


Gracias Luz :D


Bueno el premio este me lo dio Mely, no conosco mucho su blog, es nuevo, pero lo leere :D


Gracias por el premio Mely.






Y tengo que darcelo a dos blogs :D


Bueno, empecemos por uno de mis favoritos :D


La vida en mi:


De mi querida amiga Rosebelle (Lisa), Me alegro de que seas mi amiga :D


La vida en mi


Y


My secret World.


Es de Dany y aunque esta muy chiquita (12 añitos) es muy talentosa :D


My secret World.

Este otro premio me lo dieron para mis otros dos blogs :D (enserio necesito otro hobbie, son 4 blogs los que manejo :D) :D Gracias a todas las que me lo dieron :D



jueves, 21 de abril de 2011

Cap.5

Desperté mirando arriba, al techo, con un fuerte olor a alcohol, la cabeza me daba vueltas, solo recuerdo la gran impresión de la noticia que me acababa de dar Dakota.

¿Me había desmayado?, Si hacía cuenta de todo lo que había vivido hoy, era considerable ¿No?.

Me moví, ¿Cuanto tiempo había estado inconsciente?.

-No te muevas, el sofá no es muy grande- me advirtió Dakota.

-¿Dakota?- su voz se me hizo como agua en el desierto aunque ahora podía darme el lujo de enojarme con ella.

¿Habían pasado dos años y ella no me dijo nada sobre Nathan?, ¿Sobre que yo tenía un hijo?...

Ok, Yo tenía un hijo...

No lo podía creer.

Aun así ignorando su comentario rote en mi para sentarme y mirarla.

-¿Donde esta Nathan?- pregunte.

-En su habitación, durmiendo- contesto con calma- Después del desmayo, Andrew me ayudo..

-¿Que?, ¿Andrew?-

Me miró avergonzada, como si hubiera dicho más de la cuenta.

-Bueno, Drew, él, viene todas las noches a....Ver a Nathan, lo quiere mucho- contesto.

Fuego fue recorriendo mi sangre, era como ¿Andrew venía y se creía con el derecho sobre mi hijo?..

-En realidad él esta en la cocina- murmuro muy bajo Dakota- Tu te quedaste dormido..

-¿Me dormí?- ¿Como diablos podía dormir en estas circunstancias?.

-Si, yo no podía contigo, has subido unos kilitos de masa muscular-

Me levante, ya estaba bien, ella me siguió con la mirada.

-Nathan es mi hijo..¿Porque diablos no me lo dijiste?- pregunte realmente enfadado.

-Yo...- por un momento agacho la cabeza, eso me sorprendió, ella no era...de..las que..

Hahaha, allí estaba mi Dakota, si, ella levanto su mirada a mi, orgullosa como siempre.

Se  incorporo y me miró a la altura, aunque le sacaba algunos centimetros.

-Porque te tenía miedo, tenía miedo de que, al odiarme, me quitaras lo único que es importante en mi vida, a mi hijo, tu tienes muchisimo dinero, mucha fama, yo, solo llevo mi vida normal, hice esto con lo que quedo de mi después de ti- dijo mirandome, esos ojos me penetraban hasta el alma.

¿Había dicho odio?.

-¿Odiarte?, ¿Cómo diablos yo podría odiarte a ti?- pregunte algo enfadado, ¿Como podía creer eso?.

Ella me miro ahora confundida, estaba furibunda y confundida, genial, eso no era una buena convinación.

-¿Tu- no- me- odias-?- separo cada palabra, como tratando de asimilarlo.

Negué con la cabeza y la sujete por los hombros haciendola mirarme.

-Yo no podría odiarte- la miré con ansiedad, con intensidad, para comprobar si esa conexión entre nosotros seguía allí y así era, porque cuando al fin me sostuvo el corazón me empezo a latir con fuerza, que casi se me olvidaba lo que iba a decir- ¿Como odiaría a la persona que más amo en mi vida?, a la chica que me dio mi dirección, que me salvo de mi obscuridad.

...................................

Tragué saliva, estaba aturdida, tenía ganas de llorar, tenía ganas de decirle a todos que se fueran, que me dejaran sola, porque todos los recuerdos que estaba conteniendo desde hace dos años se me vinieron encima.

Todo, desde el principio hasta el fin, mis heridas volvieron a abrirse y las inseguridades también hicieron presencia.

Su mirada se volvía más intensa cada vez, no lo soportaba, y cuando vi que se inclinaba asía mi supe que sin no paraba esto ya sería muy tarde.

-Basta- murmuré.

-¿Que dijiste?- pregunto Jack alejandose de mi.

-Ella dijo que ya basta- me había olvidado completamente de la presencia de Andrew en mi cocina.

¿Que había estado pensando cuando le permití quedarse?.

Jack dirigió su mirada a él, enojado.

Yo miré a Andrew, estaba también en posición algo tensa.

-¿Quien eres tu para decirme que tengo que hacer y no?- pregunto Jack.

-Soy el que estuvo con ella cuando tu no-

Oh Dios, esto no era nada bueno.

-Yo no estaba porque ella no quiso- Ah bueno, ahora era yo la culpable, en parte si, pero me hirió un poco que me lo dijera.

-No le heches a ella la culpa, si tu no hubieras estado tan preocupado por ti, por la empresa que "Tu" no querías, por tu carrera, hubieras tenido lo que pudo ser tu familia- le dijo con pasión, con enfado y con orgullo.

Yo me quede boquiabierta, no quería que Nathan escuchara esto, no necesitaba más problemas.

-Olvidemos esto si, Jack, hablare con mis abogados mañana en la mañana, Andrew por favor- le suplique- Nos vemos mañana-

-¿Hablar con tus abogados?, ¿sobre que?-

-Sobre la custodia, por favor, hoy no-

Abrió los ojos sorprendido.

¿Que había esperado?.

-Mañana, el el Olive Garden, en Hollywood, a las 12 en punto- me dijo antes de irse sin decir nada más.

Espere a que se escuchara la puerta cerrarse, después me volví a Andrew.

¿Debía enojarme con él?, La verdad no estaba segura, esto paso a ser su asunto cuando lo tomé de la mano ese día y lo arrastre junto a mi al huir.

-¿Estas bien?- pregunto asercandose a mi.

-No lo sé, si dejamos atrás el daño emocional y la presión arterial que me provoca este tipo de situaciones, además de la preocupación por Nathan, de todo lo que se me viene encima, si creo que voy a estar bien sin no me da un ataque al corazón- dije realmente exhausta, dejandome caer sobre un sillón.

-No, yo te ayudaré, no estas sola- me paso su brazo por el hombro y yo recoste mi cabeza en su pecho.

Tenía ganas de llorar, de ser la damisela en apuros por una vez, dejar de aparentar ser la mujer fuerte, la que puede con todo, la que es de hierro.

Porque en verdad no lo era, ya estaba cansada de cargar con todo, estaba cansada de las noches en vela, sola, preocupada por el mañana de Nathan, estaba cansada de sentirme frustrada por la falta de un hombre en mi vida.

Y allí estaba Andrew, como siempre, como mi roca fuerte, la que siempre estuvo allí y ahora podía recostarme por primera vez.

Llorré, me desahoge completamente, vacíe mi ser y limpie mi alma.

Pero, ¿Ahora que Jack había vuelto? ¿Que pasaría?, odiaba la forma en que el corazón se me aceleraba, la forma en que sus manos rozaban mi piel y me habían anhelar sus besos, la forma en que sus ojos me miraban y me sentía en casa.

Pero con Andrew, con este hombre maravilloso que estaba dispuesto a esperarme, que adoraba a mi hijo y me hacía sentir segura, ese tipo de cariño que sienten los ansianos cuando aun siguen juntos después de tantos años, algo suave, algo que llenaba de ternura la sangre.

¿Qué elegir?, ¿El amor de mi vida? ¿O la nueva esperanza de un nuevo amor?

.....................................................

Si, se que eh escrito unos más largos, pero, me gusta terminar así mis capitulos, lo dejo a su consideración, ¿Que elegirían ustedes?, ¿El amor de tu vida? ¿O uno nuevo?.


o como dicen la canción de Selena Gomez, "Como la primera vez, el único y verdadero amor".


Hahaha, bueno, Gracias por comentar :D las adoro y espero que les guste el capitulo.


Hola a todas las nuevas, gracias por leer y comentar, espero que les guste.


Un saludo de su amiga Alejandra :D, bueno Agueda Alejandra.

miércoles, 20 de abril de 2011

Hola, aviso importante, "Nueva historia".

Hola todas chicas bellas hermosas, preciosas :D


Bueno, mis queridas seguidoras, sean Bienvenidas las nuevas y mis chicas de planta :D, espero que hasta ahora les agrade la historia :D


Vengo a decirles algo:


Con Gaby, empecé una nueva historia, se llama: Amor después de la muerte.


No tiene nada que ver con la historia de la chica de eslamoda.com, ok, haha el titulo se parecera pero se que la historia les gustara muchisimo :D


Les diría de que se trata, pero....LA SIPNOSIS YA ESTA EN EL BLOG.


Pasen por el y siganlo, se que les gustara, pienso que no hay muchas como estas y Gaby es una chica muy talentosa :D


Las espero en "Amor después de la muerte" :D


Y pronto les traere otro cap :D

lunes, 18 de abril de 2011

Cap.4

Las cosas no iban a solucionarse pensando y yo lo sabía, pero..¿Que más podía hacer?..

Di vueltas en mi cama, empapada en sudor mirando el reloj de noche que no me hacía el favor de avanzar.

¿Qué sería de mi relación con Andrew ahora?, ¿Qué pasaría con Nathan?.

La preocupación por mi hijo me hizo llevarme la mano al corazón.

Nathan.

Y Jack, ese escalofrió que me proporcionaba el recordarlo, el volverlo a ver era un shock para mí.

Mi vida se había ido reacomodando y sabía que no debía de volver a girar en órbita alrededor de Jack, si mi planeta necesitaba un sol, que fuera seguro, necesitaba esa protección, Nathan se lo merecía.

¿Y quién podía darme esa protección?, el único nombre que se me venía a la mente ahora, era Andrew, era él y no podía ser nadie más.

La ganas de llorar me invadieron, ¿Cómo hubiera sido mi vida si me hubiera quedado?, ¿Si en vez de darle la espalda a el amor de mi vida, hubiera dicho “Si” y firmara el papel?.

La empresa de su padre no se hubiera ido a la ruina, ni Jessica se hubiera quedado con la mitad de la fortuna de los Master al separarse del gran Thomson Master.

Yo hubiera renuncia a mi sueño…

Pero no me arrepentía de la decisión que había tomado..

Me di vuelta por última vez para ver el reloj, la luz roja me marcaba las 4: 30 am.

Cerré los ojos en una esperanza vana de poder conciliar sueño alguno.
…………………..

POV Jack.

Los días fueron pasando, y yo tomaba decisiones cada vez más grande a medida de ellos.

John tuvo que volver a Australia, pero regresaría, y lo haría con Tom.

Y yo no estaba dispuesto a marcharme de nuevo, le deje claro a Greck esa mañana, me había trasladado del hotel a mi casa después de la charla de hace tres días con John.

-¿Estas loco?- me había dicho furibundo, su calva se ponía roja mientras asimilaba lo que yo le había dicho.

-No, no lo estoy, aunque si lo piensas del modo tuyo tal vez si- tomé con calma la limonada que tenía enfrente.

-Te acaban de ofrecer tu tercera gira mundial, TERCERA- rectifico- ¿Sabes lo que estas dejando?.

-Si lo sé- miré la fuente que estaba en el enorme patio de la casa, era un día precioso y me sentía inspirado- 

Pero pierdo más si me voy, Greck, es todo RENUNCIO.

Los ojos de mi ex representante se abrieron de par en par.

-Esto te traerá muchos problemas-

-Me importa poco- me encogí de hombros, me levante dispuesto a terminar con esta conversación- 

Podemos hacer una rueda de prensa si quieres, te mandare tu liquidación este fin de semana, no te preocupes amigo, será una suma considerable, has con tu vida lo que quieras, lleva a tus hijas a un crucero, yo que sé, nada en dinero, besa a una chica, disfruta de tu vida- le di la mano y él se fue atónito.

Llene mis pulmones de aire, fresco, limpio.

Era muy difícil encontrar una zona en Los Ángeles en la cual vivir apartado del estruendo de una ciudad llena de vida, así que había comprado un pequeño rancho a las afueras, nadie me molestaba allí, era como mi propio Neverland.

Pero ordene que se me trajera el auto, hoy recuperaría al amor de mi vida, costase lo que me costase.

……

El día era fresco, perfecto para pasarlo en la piscina de la casa de Andrew, era miércoles, había aceptado revisar los nuevos guiones de su serie televisiva y eso hacía mientras vigilaba que Nathan no se acercara mucho a la piscina, pues temía que callera y no escuchara cuando lo hiciera.

-¿Quién es la mujer más bella de Hollywood?- pregunto Drew desde atrás.

Reí suavemente y baje el grueso guión que sostenía en las manos.

-¿Nathalie Portman?- respondí.

Tomo sitio a mi lado, llevaba solo unas bermudas y una camisa color caqui, le sonreí a mi gran amigo.

-Claro que no, si quisieras trabajar conmigo como direc…-

Pero no lo deje terminar.

-Ni mencionarlo, ¿Y dejar a Nath en una guardería?, él me necesita- miré a mi hijo con ternura, con un amor sobrehumano.

La ausencia de su padre era tan dolorosa para mí, como debía de serlo para él.

-Se podría arreglar- se encogió de hombros y levanto sus gafas de sol para mirarme con sus penetrantes ojos azules.

-No lo haré, aunque me gustaría poder volver a ganar otro Oscar-

-Lo harías, de lo aseguro-

-Ya, mejor dime, ¿Qué tal tu día?-

Me contó todo acerca del set de grabación y trato de convencerme otro par de veces, pero me aterraba tanto de que Nathan llorara y yo no poder estar allí o algo por el estilo.

El sol fue cambiando lentamente de posición en el cielo, era hora de volver a casa.

-Vamos Nath, te preparare lasaña de cenar- le tendí los brazos y él también, lo abracé.

-Los llevo a casa- se ofreció Drew.

-No es necesario, hoy conduzco, el auto después no arrancara por no usarlo- le planté un beso en la mejilla y 
con el niño en brazos salí de la casa que había sido mi hogar por mucho tiempo.

Todavía tenía que comprar algunas cosas en el súper si quería hacer lasaña para la cena, así que fui a Wall-
Mart, para comprar los comestibles que faltaba.

Todo iba bien hasta que pasamos por el área de electrodomésticos, donde las muchas pantallas planas pasaban la misma imagen.

-Mira mami- dijo Nath, le preste atención a él, me gustaba mucho el sonido de su voz, aunque fuera solo por unos pequeños instantes.

De pronto me entristecí, la imagen era de un joven roquero que salía de su casa en Malibú, aunque este no era el mismo que había visto hace unos días, sino otro, lo conocía bastante bien, para saber que humor era el que predominaba en él..

El corazón se me encogió y miré a Nathan con un poco de aprensión, era tan receptivo como yo, si yo conocía a Jack, Nathan me conocía también igual.

¿Porque la única persona que podía hacer hablar a Nath era precisamente Jack?, Aquel que me había dado la espalda.

No seas rencorosa Dakota, me dije a mi misma mientras sujetaba una lata de salsa para pasta italiana.

Él debía de odiarme y yo había escogido hacer mi vida sin él en ella, me provee a mi misma que era capaz de vivir sin él, pues al final todas las heridas sanaban, como las mías, aunque lentamente, pero sanaron.

-¿Quieres lasaña o ese spagetti de la receta de la abuela?- le pregunte a mi hijo, el cual me miró con especial atención y negó con la cabeza.

-¿No que?- pregunte- ¿Spagetti?- el dijo que no de nuevo y supe que tipo de salsa tomar.

Era un hecho, cocinaría lasaña esa noche.

---  ---  --

El lugar en que mi auto se aparcaba enfrente de mi casa ya estaba ocupado, por un mercedes con la capota puesta y los vidrios tintados.

¿Quien sería?.

Deposite a Nath en el suelo y en un brazo sujete la bolsa con los comestibles, al mismo tiempo que alguien se bajo del auto.

-Disculpa amigo tu auto esta estaciona-na-do - Me quede paralizada otra vez, cuando una sonrisa se dibujaba en el rostro del mismisimo Jack Master.

Como instinto tomé de la mano a Nathan y lo puse justo detrás de mi, como protegiendolo, protegiendolo de su propio padre.

-Hola Dakota- el sonido de su voz me hizo latir el corazón tan fuerte y acelerar la respiración tanto que pensé me desmayaría, no era una buena reacción y me moleste conmigo misma y también con él.

¿Que se creía?, después de todos estos años, solo llegar a mi casa y decirme "Hola Dakota", como si no hubiera pasado nada, como si la ultima vez que nos vimos yo no lo estuviera abandonando.

¿Que tenía que decir ahora?, me había quedado callada como una estúpida.

-¿Jack?- fue lo único coherente que pude omitir.

Su sonrisa se hizo una mueca suave.

-A pasada algún tiempo, ¿No?- parecía tan relajado, tan....Normal.

Yo solo asentí, aun sin salir de mi asombro.

-¿Él es tu hijo?- le costo un poco de trabajo pronunciar la palabra "hijo".

¿Que debía de hacer?, bueno, si él quería jugar el juego, "seamos amigos" yo podía jugarlo también.

-Si, yo....¿Quiere cenar hoy con nosotros?- ¿Que? ¿Que demonios hice?.

Me sonrió y se separo de su auto.

-Lamento taparte tu estacionamiento, si quieres..

-No esta bien, vamos- mis voz no mostraba ninguna emoción, porque en ese momento no sentía nada, tal vez se debía a la adrenalina que se disparo en mi sangre o simplemente el aturdimiento de lo absurdo es esta situación.

Tome las llavez y abrí la puerta, tratando de que Jack no viera la forma en que las manos me temblaban, en como podía volverme a poner nerviosa con solo sentir su mirada en mi espalda.

-Hola- sentí como cambiaba de posición y se agachaba a al altura de Nathan, me tensé de inmediato y tenía ganas de gruñir y decir "Alejate de él, es MI HIJO".

¿Pero quien era yo para prohibirle ver a su propio hijo?, tal vez era lo bastante egoista como para alejarlo de él, para no resultar herida yo misma.

Pero Nath se abrazo a mi pierna mirando fijamente a Jack.

-¿Es muy tímido eh?- se dirigió ahora a mi.

Entre en lugar de contestarle y me dirigí directamente a la cocina.

-Nathan ve a tu habitación y cambiate de ropa- le ordené, él asintió y espere a escuchar el ruido de su puerta al cerrarse.

-¿Pasa algo?- pregunto muy serio, mirandome desde la mesa.

-Dimelo tu- 

Se acerco a mi y pude sentir su presencia detrás de mi, me volví para encararlo, pero no fue necesario, lo tenía a cinco centimetros de mi.

-¿De quien es el niño?- casi me exigió saber- ¿Quien es su padre?- 

Puse mis manos en su pecho y lo empuje, no podía pensar con claridad.

-¿Que te importa?- me aleje molesta de él.

Me siguió y me sujeto por la muñeca casi asiendome daño.

-Bruto sueltame- me queje tratando de safarme de su agarre, pero no era por que me dañara en realidad, sino que su toque me quemaba la piel.

Solo soltó un poco pero todavía no lo suficiente para lograr safarme.

-Dimelo Dakota, ¿Nathan es mi hijo? ¿O es de Andrew?- tragué saliva, la intensidad de sus ojos en mi....

¿Que le diría?, ¿Ya era el momento?, ¿Estaba yo lista para todo esto?.

Estaba tentada en decirle que era hijo de Andrew, pero no sería justo.

-Jack, Nathan es tu hijo, él sabe quien eres, tu eres su padre- le grite y sentí que un peso se salia de mi, como si hubiera guardado tantas cosas en mi...

Jack me soltó al fin y calló sobre una silla.

-No lo puedo creer- murmuro y solamente calló de la mesa inconsciente.

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Hahaha, ayer me quede escribiendo esto hasta la 1 de la mañana, :D,  quería hacerlo así como, No, el no es tu hijo, es de Andrew y pensaba hacerla que se comprometiera con él y bla bla, oh hahaha...


Pero me pareció gracioso que Jack se desmayara :D él se lo busco.


Voy a cambiar el personaje de Andrew, creo que ocupo alguien más maduro para hacer su papel hahaha, hablo como si fuera a contratar al actor para hacer la pelicula hahaha


Bueno el nuevo Drew es : (redoble de tambores) Garrett Hedlund :D


Me gusto como se vio en la pelicula Country Strong :D 


Y pensé en el para el personaje :D


Gracias a todas las que me estan apoyando en el concurso de Eslamoda.com :_D


Lo apreció mucho :D y aunque no gane adoro a mis seguidoras :D


Este capitulo es para ustedes :)




domingo, 17 de abril de 2011

Ya esta listo!!

Hola mis seguidoras :D Pliss, pliss :D

Votarian por esta historia en eslamoda.com??? :D

Es importante para mi y me gustaria que me apoyaran :D

http://eslamoda.com/noticias/chismes/escoge-la-novela-eslamoda

Por favor ustedes que la han leido :D

sábado, 16 de abril de 2011

Cap.3

Unió sus labios con los míos, eran suaves pero firmes, sabían lo que hacían.

Tanto tiempo sin besar a nadie, que me alegraba, casi era un alivio volver a serntir el calor de un hombres junto a mi, un hombre como aquel, como lo era Andrew, un hombre de verdad, mi mejor amigo, mi compañero, era lo que yo estaba esperando, no lo sabía.

Mi respiración se acelero y busque con mis manos su rostro para poder tocarlo, su barbilla estaba descuidada y el bello en ella lo hacía más tentador, sus dedos se perdieron en mi pelo y me atrajeron más a él.

El beso se prolongo, y a mi no me importaba nada, sino el largo exploramiento de su boca...

Me separe de él cuando la imagen de otro hombre cruzo como una ráfaga por mi mente, era el recuerdo de las manos de Jack, no aquella ultima vez, sino la primera, cuando me guió a lugares que yo no conocía...

Andrew me miró a los ojos, estaba satisfecho y feliz, se levanto mirando que ya había obscurecido y algunas pocas estrellas estaban en el negro cielo.

Recuperé el aliento y lo imité, sin decir nada entramos a la casa.

-Mira como duerme- él estaba inclinado sobre Nathan, que seguía profundamente dormido, me apoye en el marco de la puerta y los observé.

-Es un angel- respondí llena de amor por mi hijo, aunque algo se revolvió dentro de mi, era la preocupación que no me dejaba sola.

-Si- pasó sus fuertes brazos por las pequeñas piernas del niño y lo elevo recargandolo contra su hombro, Nathan, aun inconsciente le rodeo el cuello con sus brazos descansando la cabeza sobre su pecho.

Los seguí escaleras arriba y le abrí la puerta para que cumpliera su cometido, como todas las semanas, aparto las sabanas y acostó a Nathan, quitandole los zapatitos y poniendolo cómodo.

-Duerme bien- le deseo en voz baja dandole un pequeño beso en la mejilla, después se dirigió a mi.

-Tu también duerme bien- me planto uno en la frente y se dispuso a salir, pero de los sonrosados labios de Nathan se escapo una palabra.

-Papá- alcancé a escuchar, Andrew se congelo en la puerta, sonrió y se marchó dejando solo el sonido de la puerta al cerrarse detrás de él.

¿Que iba a hacer ahora?, algo había cambiado y no tenía idea de que, la calidez de Andrew y la mostrada frialdad de Jack, la ausencia de un padre para Nath y le vació que necesitaba llenar yo.

Necesitaba a alguien y era obvio que Jack no volvería, ya no le importaba, su orgullo y el mio no lo permitían.

Suspiré resignada a mi rutina, a volver a mi cuarto y me de sentirme sola.

Como hace dos años, en aquella estación de tren, en aquel invierno, antes de que él apareciera y lo cambiara todo.

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No quería salir, estaba harto de todo esto, ¿Cuando se me había metido la idea de querer ser cantante?...

No, el problema no era que yo fuera cantante, sino que quería ser "famoso".... Se me ocurrió separarme de las únicas personas que de verdad me apreciaban.

Volver a ver a Dakota me había hecho recapacitar de mi vida, querer volver a reconstruirla...Como había hecho desde que la conocí, desde esa mañana en el metro, cuando aquella muchacha apurada había chocado contra mi guitarra y temrino empapada por que su orgullo la llevo a caer a una fuente..

Sonreí, aunque me dieron ganas de llorar.

Era como la bolsa de valores, mi vida había ido en plus-valía cuando la conocí y cuando se fue,  empezó a desplomarse hasta que toque fondo, cuando ahora me di cuenta que estaba perdido sin ella, no quería aceptarlo, me había vuelto un completo don nadie y la "fama" solo servia para tapar algo que a fin de cuentas no se podía ocultar, que la necesitaba, ella era mi salvavidas, era mi mitad completa y tal vez, ya la había perdido para siempre.

-¿Jack?- pregunto una voz masculina conocida, que me dio mucha alegría volver a escuchar, le levante y le sonreí a mi, amigo...

-John-

Se sentó delante de mi y me miró con atención.

-¿Que que quieres hablar?- pregunto cruzando los tobillos.

-No lo sé, de ti, yo...me di cuenta de que...-

-De que estabas solo, de que te equivocaste- sonrió y yo reí un poco.

-Si, pero no es necesario que me lo restriegues en las narices, solo quiero recuperar a mis amigos- había llamado al servicio a la habitación y entraron, pues no quería que nos interrumpieran.

-Claro, ¿que hice?, en realidad no hay mucho de que hablar, me ocupe de la empresa de mi padre y estudie negocios internacionales, por eso estoy aquí en California- me miró con superioridad, como siempre lo hacía, me hacía darme cuenta que necesitaba de él como mi consejero.

-¿No me preguntaras que hice yo de la mia?- aunque no fuera nada de lo que me sintiera orgulloso.

-No, ya lo sé- espero a que terminaran de servir la comida en la mesa de la terraza- Nos separamos, después firmaste tu primer disco, una gira mundial, después muchos escandalos, después otro disco, te dijero cretino en New York Times y estas a punto de perder tu contrato con Sony por los problemas que les das, aunque sigues llenando el estadio cuando cantas- me dio su resumen- Tienes tres casas, una aquí mismo y no quieres hospedarte en ella.

-¿Como lo sabes? Sobre la casa-

-No quería dejarte solo a tu merced, tampoco a Tom, el y yo desayunamos juntos en Nueva York cada mes, conserva el departamento todavía- saco una gruesa carpeta que llevaba escondida y la puso sobre la mesa- Pero ni a ti ni a él los seguí más que a ella- la primera imagen era la que yo había visto aunque diferente, era el mismo niño, era de seguro hoy en la mañana..

-¿Dakota?- tomé la fotografia.

-Si, contrate un investigador privado que la siguió desde que abandono New York con Andrew, su vida día a día me fue informada, pero aquí estan los informes mensuales- me los tendió todos.

El estomago se me hizo un nudo, los tomé..

-La vio hoy, la volví a ver- le confesé.

Parece que a él no le sorprendió.

-Lo sé, no encontré otra explicación para tu cambio de actitud- tomó un trago de vino tinto- Solo que me entristece que tuvieras que volver a verla, para que te dieras cuenta de que la necesitas.

-Si soy un estúpido lo sé....Y no solo me di cuneta de que la necesito, sino de que también los necesito a ustedes, a ti, a Tom, tus consejos y sensatez me hicieron falta y yo no te quise escuchar- me tragué el orgullo que me impedía hablar- Lo lamento.

Me dio un golpe demasiado fuerte y me queje, pero John se burlo de mi.

-Te lo mereces por ser un estúpido- termino su comida sonriendo- Recuperaste a tu amigo, lo dijimos de niños, Todos para uno y uno para todos.

-Pero yo les fallé- No quería admitirlo, pero estaba conmovido y feliz.

-Lo sé, pero se perdonar, perdiste el amor de tu vida y la alejaste de mi, ¿Sabes que pude haber ido tras ella?, pero me di cuenta de que, al tomar la mano de Andrew, nunca me pertenecería a mi, eso es entre tu y él, yo ya me resigne a perderla, la pregunta aquí es..¿Y tu?- enarco las cejas para darle un toque dramatico a su pregunta.

Eso era una buena pregunta, miré a la noche, el cielo no tenía muchas estrellas y las luces de la ciudad eclipsaban a las pocas que había, ¿Me había resignado a perderla?..

Para mi nunca hubo nadie más, fue ella y nada más ella, las demás no importaban, ni siquiera recordaba el nombre de la ultima chica con la que me acoste..

Ahora tenía esta oportunidad y toda la información en mis manos.

-No, no hasta que ella me diga que la eh perdido para siempre- sonreí lleno de esperanza por primera vez en años.

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Hola, hola, hola :D Inicio de vacaciones en México y yeah :D


Bueno, para Evelyn :D de eslamoda.com, Sip soy yo la que te mando la novela la misma Agueda Montes, hahaha, bueno mi nombre es Agueda Alejandra Montes :D


Umm, ya revele algunas partes de mi otra novela ¬¬ era necesario :D


Para las que no lo sepan y creo que si lo saben tengo estos dos blogs mas:


Los secretos detrás de ti

Mi historia con Romeo: Buscando mi propio camino.

Me gustarían que las siguieran y comentara :D


Gracias, plis comenten y apoyenme en en concurso de Eslamoda.com :D Aunque todavía no salga.


Bye bye.

martes, 12 de abril de 2011

Cap.2

No podía creerlo, el shock fue tan grande que casi pierdo el equilibrio, si no hubiera sido por sentir la mano de Andrew en mi espalda.

Nathan lo había reconocido, así de fácil, había hecho que él hablara, como una madre leona me apresure a abrazarlo y él no apartaba la mirada de Jack.

-¿Que pasa?- pregunto Andrew, aun sin percatarse de la situación- Mira Nath, unas orejas de Mickey, para que cuando lo conozcas te parescas a él- le habla tan cariñosamente, pero yo seguía sin apartar la mirada de aquella estrella de rock, nos miramos a los ojos, era imposible que no me hubiera reconocido.

Pero él se dio la vuelta y siguió su camino..

El corazón que había vuelto a palpitar agitadamente, volvió a romperse, no fue por el rechazo a mi, lo aceptaba, yo lo había dejado, pero....A Nathan, ¿Como era posible? Su hijo lo había reconocido, ¿Y él no?.

-Dakota, ¿Estas bien?, Dame a Nathan- dijo Drew preocupado, me imagino la cara que traía..

Lo obedecí sin decir nada y Nathan le tendió los brazos para resivirlo, lo cargo sobre sus hombros.

-¿Necesitas agua?, Dakota-

-No yo estoy bien, sigamos- traté de sonreír.

Miré a Nathan, que estaba como distraído, como en su propio mundo, estaba aterrada, no sabía como lo afectaría el rechazo de su padre.


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Estaba agitado, necesitaba un descanso, pero la gente no me dejaba en paz..

Ese niño, ella, y luego llego Andrew poniendo su mano en su espalda y sujetando al niño..

Pero ese niño...

Me senté en una banca y me frote las sienes con los pulgares, la resaca y las resientes emociones me traían muy mareado.

La había vuelto a ver, había vivido del recuerdo de su espalda saliendo de aquel jusgado que me había formado la idea de perderla para siempre.

Y la había abrazado, la había amado tantas veces en mis sueños, siempre terminando en la misma decepción de saber que no volvería.

Y simplemente la había visto, así, como si los dos años que pasaron no hubieran cambiado nada en ella, seguía siendo la perfecta mujer de mis sueños.

No sabía que hacer, así que decidí largarme de allí y volver al hotel.

En el taxi me di tiempo para poder pensar, en poder recapacitar en estos dos años, en los cuales al parecer había olvidado todo lo que valía en mi vida, mi hermana, mis amigos....Enterrando cualquier recuerdo.

No había asistido a la boda de Miriam con Antonio, después me comporte tan mal con mis amigos que terminaron hartandose de mi, pensaba que no necesitaba a nadie, así lo demostré.

Me dejo en la puerta del hotel y yo me apresure a entrar.

-Señor Master, su padre llamo- dijo al recepcionista pero no le hice caso y subí al elevador que me llevo a la puerta de mi habitación.

Entre como un bólido, sabía que lo había dejado por allí, no me había desecho de él...

Lo busqué entre los instrumentos y si... junto a la vieja guitarra estaba la caja con el celular.

Todavía tenía la pila y deseaba que la linea aun no estuviera dada de baja.

Lo encendí y busque entre los numeros principales..

John..

El numero era el que siempre usaba en America, detestaba cambiar de numero cuando cambiaba de celular.

Recé porque estuviera...

Empezó a timbrar, y el corazón se me acelero y la garganta se me seco.

-¿Diga?- respondió la voz de mi viejo amigo.

-John- murmuré.

Hubo un silencio eterno, debía de odiarme.

-¿Que necesita Mr. Master?- pregunto conteniendo la voz.

-John, yo quiero...Disculparme- fue lo único y más acertado que pude decir.

-Yo ya te perdone desde hace tiempo, aun así, no estoy feliz de lo que has hecho con tu vida- no era el mismo chico de siempre, ese con el que hablaba, ya era todo un hombre, a lo contrario que yo.

-Lo sé- resoplé- ¿Donde estas?- pregunte.

-Estoy en California- respondió cortante.


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-La mamá también tiene que sonreír- dijo Mickey Mouse.

Maldito Mickey Mouse, preocupate por ti.

Pero aun así fingí la sonrisa acomodando a Nathan en mis brazos para que saliera en la foto bien.

Andrew la tomo y nos depedimos del ratón.

-¿Te duele algo Dakota?- pregunto Andrew volviendo a cargar a Nath.

-No, bueno, tal vez un poco la cabeza-

-¿Quieres regresar a casa?- no me pregunto a mi, sino a Nathan, sabía que si el niño le decía que no se quería ir, no nos iríamos, pero él dijo que si con la cabeza- Esta bien, andando.

Yo no despegaba la mirada de la expresión de Nathan, estaba preocupada y angustiada, él conocía a su padre, sabía quien era y la había visto por primera vez....

Salimos del parque y subimos al auto de Andrew, él acomodo a Nath en el asiento de atrás, asegurandose que estuviera a salvo.

Sentí un nudo en la garganta, al recordar aquella discusión que tuvimos hace mucho tiempo.

-¿Casate conmigo?- había dicho tomandome las manos en las cuales todavía tenía los resultados.

Lo había mirado confundida y algo aturdida.

-¿Qué?- pregunte.

-Así estarás segura, esta casa ya es tuya, ahora hay dos en quien pensar, se que puedes hacerlo sola, pero no lo estas- el apretón de su mano era seguro pero suave, me brindaba eso que siempre supe encontraría con él.

La protección.

Pero yo no aceptaría un matrimonio así, sino fuera por amor, nunca me casaría si no fuera por otra razón.

Así que le había sonreído y levantado, me imitó y yo lo abracé.

-Gracias, gracias por todo lo que has hecho por mi, te quiero mucho- tragué saliva- pero no lo suficiente para casarme contigo.

-¿Dakota?- escuché una voz lejana..-¿Dakota?, ¿Debería de llevarte al hospital?-

Era momento de regresar a la realidad.

-No, yo estoy bien- respondí, miré el espejo retrovisor el cual me dio una vista de Nathan que miraba los carros pasar, después volví a mirar a Andrew mi gran amigo y le sonreí- Gracias Andrew, Gracias por siempre estar allí.

-Siempre- respondió, él también dirigió la mirada a Nath- Se la paso bien hoy ¿Verdad?-

-Claro que si- sonreí abiertamente.

-Que no daría porque él fuera mi hijo- murmuro lo suficientemente fuerte como para que yo lo escuchara.

Pasando los minutos, Nath se quedo dormido, y yo traté de dejar de pensar en mis problemas, había vuelto a ver Jack, si, pero...¿Acaso no lo había visto miles de veces en la televisión?, Diario salía algo sobre él, así que me convencí que no debía da cambiar nada....Porque no había pasado nada.

Andrew aparco enfrente de mi casa, bajé y él saco a Nath con mucho cuidado para no despertarlo, el día seguía siendo caluroso a pesar de que la tarde ya era avanzada.

-¿Tienes limonada?- pregunto depositando a Nath en el sillón, el niño se acomodó instantaneamente y suspiró satisfecho.

-Si, en el refrigerador, podemos ir afuera y sentarnos en el jardín- me encaminé  la cocina y serví dos vasos, pero lleve conmigo la jarra con la limonada, él ya estaba sentado junto a una mesa disfrutaba de la vista fuera de la ciudad, donde se podía apreciar el cielo, el cual se estaba poniendo de color anaranjado y rosa, por la puesta del sol que ya se estaba perdiendo más allá de la valla.

-Esa reja necesita una buena pintura- tenía la mirada perdida y ni siquiera me volteo a ver- ¿De que color se vería bien? ¿No te gustaría un blanco o un rojo?...

-No lo sé, mañana después de revisar los guiones que me mandaste, iré a...

Pero él no me dejo terminar.

-Así es como siempre quise mi vida- dijo, aun sin apartar la vista del cielo.

-¿Tu vida?- pregunte.

-Si, así, aunque se que solo me estoy engañando- ahora si me miró, se veía que sentía una paz, pero al mismo tiempo un pesar en su corazón- Una mujer hermosa de corazón, una casa tranquila, donde siempre haya cálides, uno o varios niños a los cuales poder proteger...

Su mirada era intensa, que no podía apartarla, solo sentí su aliento cuando se inclino sobre mi, el corazón latia de nuevo fuerte.

Tal vez esto era mi destino, tal vez debía de pasar todo esto para darme cuenta que podía amar a otro, pero donde estaba mi alma gemela era en otra parte, que podía seguir mi vida sin sentir el dolor y la culpa de algo.

Que podía al fin reconstruir mi vida por completo.

Ya podía sentirlo, mis ojos se cerraron en respuesta y sentía la energía entre nosotros, sus labios a milimetros de los mios..



..   ...   ..

Huuy, hahaha, ¿Ustedes que creen?, ¿Se besan o no?... :D


Gracias por comentar :D es mi mejor paga :D


Las adoro :D



martes, 5 de abril de 2011

Cap. 1

-¿Quieres la roja?- le pregunte a Nathan que estaba sentado en su cama mirando las dos camisas que había sacado de su closet.

El solo nego con la cabeza.

-¿La azul?- le insistí, él niño nego de nuevo.

-¿Entonces cual?- pregunte con la esperanza de que dijera el color.

Pero no, solo se levanto y tomó la verde.

Le sonreí y lo tomé en brazos para ponerlo de pies sobre la cama para poder cambiarlo.

Pero un temor me cruzo el rostro, Nathan no pronunciaba ni una palabra, nunca lo hacía, al principio pensamos que era un problema auditivo pero él esta perfecto...

Le quite la pijama y le puse la camisa, el solo se sujeto las agujetas de sus tennis y se puso el panalon.

Le sonreí a mi hijo, me miraba tan pasivamente como esperando a que hiciera algo..

Me aterraba pensar que él tuviera algún defecto, yo lo veía tan perfecto..

Mi casa no era tan grande ni ostentosa como la de Andrew, a Nathan le había afectado un poco no poder ver todos los días a Drew, el cual siempre le dedicaba algún tiempo de su día tan ocupado, hace 7 meses que nos habíamos mudado a la nueva casa.

Mi punto de no tener una casa con todas las comodidades y lujos era no llamar la atención de los medios, además quería dedicarle todo el tiempo a mi hijo.

Vivía en una casa afuera de la ciudad, en un fraccionamiento de buena condición social, donde había buena seguiridad y un buen pre-escolar.

Andrew venía a visitarnos dos veces por semana y me dejaba ayudarlo a revisar los guiones de sus nuevas producciones.

Hoy era su día libre como sabado y habíamos quedado de ir a Disneyland.

-Ve abajo y ahora bajo a prepararte tu cereal- el brincó y me obedeció.

Yo me senté en su cama y busqué bajo su almohada...

Y allí estaba lo que estaba buscando, esa foto que le había dado, la foto de su padre.

"Jack, cuanto le haces falta"

No quería llevar a Nathan con un psicologo, ya le había hecho pruebas tras pruebas, esperaba que él empezara a hablar por si solo.

Salí de su habitación y bajé las escaleras de la clasica casa, estaba pintada en un azul rey con acabados en blanco, modestamente adornada y cómoda.

Entré a la cocina donde Nath ya estaba sentado a la mesa de solo 4, saqué el cereal y lo serví con leche en un tazón, después un poco de jugo de naranja fresco.

Se escucho la puerta abrirse y una bolsa de papel se escucho...

-Andrew, ven a desayunar- le grite.

-Te vez encantadora hoy- dijo dejando una barra de pan integral, un pastelito y leche.

-Gracias, no tenías que molestarte en traer las cosas- dije mientras miraba como Nathan se levantaba y lo abrazaba.

-Hoy tiene que ser perfecto, la primera visita a Disenyland es importante para cada niño- miró insistentemente a Nath, esperando como cada día a que le dijera algo, pero el niño solo se limito a sonreirle con brillo en los ojos.

-Sientate y te prepararé café- me di la vuelta para hacerlo.

-En realidad, pasé a Starbucks y compré, un frapuchino para la linda mamá, un capuccino caramelo para mi y un rico pastelito de tres chocolates para el niño- dijo sacando de la bolsa.

-Gracias- le sonreí.

Hoy sería un gran día, me sentía feliz por primera vez en mucho tiempo.

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-Dejame en paz Grek- dije cerrando los ojos con fuerza, mi representante había abierto las cortinas y el dolor de cabeza me estaba matando.

-¿Ya miraste esto?- pregunto realmente molesto lazando lo que seguro era periodico hablando de lo que había hecho anoche.

-Lo hice, no necesito ver las notas de hoy- conteste dandome vuela en la cama.

-¿Me puedes explicar porque tienes esa pinta?- pregunto.

¿Que tenía de rara mi "pinta"?, era la que tenía desde hace dos años, ellos me había creado, me había hecho una "super estrella".

-No era lo que querían cuando me firmaron el contrato, les doy su dinero, dejen mi vida en paz-

-Necesitas salvar esto, Jack, sino perderas todo- me insistió quitandome la almohada de la cara.

La resaca era muy fuerte, no recordaba mucho de lo que había hecho ayer en la noche, desde que llegue a Los Angeles para un concierto, después de allí, era una morena y una pelirroja, ¿Donde esataba ahora? No tenía idea.

-¿Que quieres que haga entonces?- pregunte dispuesto a terminar con la discusión.

-Sal a convivir con la gente, ten- le lanzó algo a la cara, era solo un ¿pase?.

-¿Que diablos es esto?- pregunte tomandolo.

-Diviertete en Disneylandia, tendrás que hacer fila como todos los demás, Oh- me avento también un pulmón color negro y otro color plateado- Firma autografos con todos y fotos también, has lo que tengas que hacer..

Dicho esto salió de la habitación.

Me levante y todo me dio vueltas, algunas imagenes de anoche se cruzaron en mi mente y decidí darme una ducha, hoy sería un día largo..

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Todo iba bastante bien, protegida por mis lentes de sol y un buen bloqueador, caminabamos por todo el parque lleno de gente, admirando cada detalle, Andrew lo había hecho muy bien, todo estaba planeado para hacer que Nathan al fin lograra hablar.

Los personajes clásicos aparecían y los juegos estaban hechos para el entretenimiento de todos.

Drew sacaba millones de fotos, y Nathan tenía una enorme sonrisa dibujada en rostro, que lo hacía lucir sus bellos hoyuelos en la mejilla derecha.

-Ahora vuelvo- dijo Andrew sonriendo mientras miraba un hombre con diademas con orejas de Mickey Mouse.

Asentí y tomé la mano de Nathan con firmeza, mientras él miraba a su alrededor.

Pero alguien grito algo que no logré escuchar bien y todos se amontonaron alrededor de algo.

-Mira mami- me quedé pasmada allí mismo de la sorpresa, la voz dulce y suave había salido de Nathan, pero este no hacía caso de mi cara de emoción sino que apuntaba adelante.

Levante la mirada sonriendo..... hasta que me encontré con lo que había hecho a mi hijo hablar por primera vez...

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Los Ray-ban clásicos cubrían mis ojos y caminaba despreocupado por el parque, no esperaba encontrar nada interesante, pero hice lo que Grek me había pedido, tenía una multidud de gente a mis espaldas..

Alguien grito y todos concentraron su atención en mi, hasta que algunas personas dejaron las filas que llevaban haciendo por horas solo para obtener una foto o autografo y aunque los gritos y tantas voces me estaban mareando, pude escuchar perfectamente ese... -Mira mami- de un niño pequeño.

Levante mis ojos para ver de quien era esa voz, sentí una ternura dentro de mi que no tenía desde hace tiempo.

Y miré primero al pequeño niño rubio de ojos azules...

Esos ojos.

Oh Dios Mio.

El pulmón se me resbalo y calló al suelo.


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Primer capitulo..... Que emoción, espero que les guste, no más que eso que les encante :D


Gracias por comentar, también espero que les guste la nueva imagen.


Lo que dice es: Esto no es el adiós :D


Las adoro :D